No sé si el olvido fue voluntario o un mecanismo de defensa...
Vivía lejos de casa cuando una llamada de teléfono me despertó. Era pronto, muy pronto... de madrugada. Al descolgar, escuche la voz de una amiga de la familia: - Saúl, ven que tu madre se ha puesto muy malita. Y !plas!!!! desconexión, negro absoluto.
Llegó una época oscura. Tenía la sensación que mi cuerpo funcionaba en automático. No era consciente "del aquí ni el ahora" , deje de tener ideas, deje de crear. Ya no dibujaba, ya no pintaba, ya no... Tal vez, me concentre en sobrevivir.
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